El actual jugador de Al-Hilal sabe lo que es gozar la vida, haciendo una pausa en su recuperación de su lesión para tomarse unos días de descanso en su ostentosa nave.
Por: Iván Peña Ropaín.
Desde el pasado 18 de octubre, en el juego por las Eliminatorias sudamericanas entre los seleccionados de Brasil y Uruguay, el jugador Neymar Jr. no pisa una cancha a raíz de una rotura del ligamento cruzado anterior y del menisco de su rodilla izquierda, lesión que lo dejará inactivo por más de seis meses.
Al estelar brasileño se le ha visto en videos en dolorosos procesos de recuperación, los cuales cumple en ocasiones a título personal y en otras más con el personal médico de su actual equipo, Al-Hilal de Arabia Saudita.
Empero también, al 10 del Scratch se le ha observado muy alegre en sus acostumbradas ostentosas fiestas que hace junto a su familia, amigos y las infaltables preciosas modelos con las que suele rodearse, esta vez en su portentoso crucero.
En el último festejo, dado el martes 26 de diciembre y el que tendrá una duración de tres días, ‘Ney’ fue el anfitrión en su ampuloso crucero que zarpó del puerto de la ciudad brasileña de Santos.
Al tiempo que se mostraba muy cuidadoso con los movimientos de su rodilla para no lastimarse, sentado en un sillón y con bastón en mano, el exjugador del Barcelona de España dio muestras de total felicidad en todo momento, más cuando presumía los anillos y cadenas de oro que portaba y los que le facilitó uno de los cantantes que lo acompaña.
A su lesión le sacó una broma también, cuando el jugador de 31 años publicó en una historia de su Instagram una fotografía en la que se ve recostado en su camarote con una almohadilla térmica alrededor de su pierna izquierda, escribiendo: “Tratamiento a bordo, ¿Vale?”.
