Por el desespero, le tocó enajenar la propiedad por un poco más de la mitad de su valor, que es de 8 millones de dólares.
Por: Iván Peña Ropaín.
A raíz de un revés financiero que enfrenta por culpa de deudas de diversos tipos, quien fuera dos veces campeón del mundo (USA 1994 y Corea y Japón 2002) con la Selección Brasil de Fútbol Absoluta, el internacional exlateral Marcos Evangelista de Moraes, conocido deportivamente como Cafú, se vio obligado a subastar su mansión familiar.
El emblemático y extraordinario jugador brasileño puso a la venta dicha propiedad valorada en 6,5 millones de libras esterlinas (8 millones de dólares), situada en la próspera área de Alphaville, en la importante ciudad de Sao Pablo, de donde es oriundo.
Sin embargo, al no haber mucha demanda por adquirir el lujoso inmueble, Cafú, de 53 años, se vio obligado a vendérsela al que le ofreció 4 millones de libras (5 millones de dólares), un poquito más de la mitad de lo que pedía, siendo el comprador una multinacional de ese país que planea realizar el pago mediante un desembolso inicial y 15 pagos mensuales subsiguientes.
La mansión, de poco más de 2 mil metros cuadrados, incluye comodidades tales como un ascensor, un cine, una amplia piscina, un sauna, sala de juegos, un gimnasio profesional y cancha de fútbol, entre otros espacios para el esparcimiento.
