“Este sujeto acababa con la vida de sus víctimas para luego hurtarles la mercancía que transportaban”, indicó la Policía.
Uniformados de la Seccional de Investigación Criminal y de Tránsito y Transporte de la Policía, capturaron en flagrancia a un sujeto de 24 años de edad por el delito de porte ilegal de armas de fuego, quien se desplazaba por la vía Nacional en el sector conocido como el aeropuerto Monteriano.
Se trata de alias Matador, también conocido como “el terror de los camioneros”, un individuo que, presuntamente, atentaba contra la vida de los conductores de camiones de carga pesada, para luego hurtarles su mercancía o pertenencias.
“Esta persona utilizaba este vil mecanismo para no ser él la víctima durante su proceder ilícito, puesto que los conductores, por seguridad, tienden a estar armados para protegerse de grupos ilegales o de personas que aprovechan la oscuridad de la vía por donde estos conductores se desplazan para inmovilizarlos”, señaló la Policía.
A este sujeto, además, se le atribuyen los más recientes casos en donde dos conductores fueron asesinados para poder hurtarles la mercancía que transportaban. Las víctimas fueron identificadas como Juan Carlos Rueda Arenas y Julio Rafael Buelvas Cuadrado, ambos atacados el 22 y 26 de junio respectivamente. Hechos ocurridos en la ruta que de San Jacinto conduce a El Carmen de Bolívar.
A alias Matador le registran 2 anotaciones judiciales por los delitos de tráfico, fabricación o porte ilegal de armas de fuego y daño en bien ajeno, además, llegaba a otros municipios como San Jacinto, San Juan Nepomuceno, Zambrano y Plato Magdalena, y logró expandir su actividad delictiva en los departamentos del Huila, Tolima y Cundinamarca, donde es investigado por otros homicidios perpetrados.
Durante la captura le fue incautado un arma de fuego tipo revolver calibre 38 mm de fabricación artesanal y 5 cartuchos para la misma.
Alias Matador una vez capturado, fue dejado a disposición de la Fiscalía General de la Nación por el delito de fabricación, tráfico o porte de armas de fuego o municiones a esperas que un juez de la República le defina su situación judicial.
