Fue tal el descontrol, que un gran número de policías tuvo que intervenir y acordonar la ciudad.
Por: Iván Peña Ropaín.
La eufórica celebración provocada por la Selección Argentina ante la consecución de la Copa Mundo en Catar no solo estuvo cargada de alegría, también estuvo empañada por violencia y actos vandálicos.
En las últimas horas, según informó la prensa de ese país, en el epicentro de los festejos, en Buenos Aires, se registraron robos, destrozos, varios heridos, detenidos y hasta una persona perdió la vida. Un número significativo de lesionados se contabilizan por caídas desde semáforos o postes de luz de una altura de hasta cinco metros.
A pesar de la felicidad y algarabía que se podía observar en las calles de la capital, principalmente, donde se volcaron cerca de 6 millones de personas, no todo fue positivo. Entre las primeras noticias trágicas se informa la de un joven que, como tantos otros y de manera riesgosa, decidió subirse a un techo para festejar. Sin embargo, cayó, sufrió muerte cerebral y en las últimas horas falleció.
Por otro lado, el director del Sistema de Atención Médica de Emergencias (Same) en ese país, Alberto Crescenti, confirmó que tras la celebración del martes 20 de noviembre más de 30 personas resultaron heridas y algunas están en estado de gravedad.
Uno de esos heridos de complejidad fue el hincha que se observa en varios videos en redes sociales lanzarse desde un puente al bus descapotable en el que se transportaban los jugadores. En momentos en que el vehículo pasaba por debajo de la estructura, se tiró y no logró caer en su interior, dando con la parte trasera del mismo y cayó desde una gran altura violentamente al pavimento. Otro de los hinchas que también se arrojó de ese puente sí logró caer en su interior, siendo posteriormente bajado del automotor.
Con relación a los detenidos, la Policía de la Ciudad confirmó que por el momento hay 13 capturados en el marco de los festejos, algunos por intento de robo y otros por hurto, mientras otros más por incidencias aisladas.
