El entorno de las pesas y del estilo de vida fitness se encuentran conmovidos y han expresado todo su pesar en las redes sociales por la inesperada muerte del instructor Boris de la Rosa Jiménez.
Por: Iván Peña Ropaín.
Tristes, acongojados, sin palabras, consternados o en una inverosímil nebulosa. Así se encuentran los miembros de la comunidad del fisiculturismo y del gimnasio en Santa Marta y Barranquilla ante el súbito e impensado fallecimiento de Boris de la Rosa Jiménez.
Este apasionado fisiculturista y entrenador físico, como causal de graves quebrantos de salud que lo aquejaron en las últimas semanas, pereció en horas de la madrugada del viernes, al aparecer, en un centro asistencial en Barranquilla, adonde había sido remitido.
La partida de Boris, quien trabajaba como entrenador en un gym en el norte de la capital del Atlántico, también ha dejado un profundo dolor en sus seres queridos, recordándolo como una persona sencilla, alegre, disciplinada y entusiasta con la disciplina deportiva que practicaba.
Han sido incontables los mensajes no solo de quienes laboraban con él, sino de aquellos hombres y mujeres que fueron sus alumnos durante los más de 30 años que tuvo como experiencia siendo preparador físico e instructor de gimnasio.
“Sus enseñanzas y ese espíritu inquebrantable quedarán grabados en la memoria de todos los que tuvimos la fortuna de conocerlo. No solo era nuestro entrenador, era también ese amigo que te daba una palabra motivadora en cualquier momento”, otros de los muchos escritos dedicatorios a su nombre que se leen en redes sociales.