De acuerdo a la Alcaldía de Barranquilla, el Gran Malecón del Río y el Ecoparque Ciénega de Mallorquín fueron de los puntos de la ciudad más recorridos por los foráneos.
Por: Iván Peña Ropaín.
Sin lugar a dudas, eso que dicen muchos de que Barranquilla se ha convertido en una de las ciudades modelos en Colombia por el enorme progreso expuesto en los últimos años, lo volvió a ratificar esta Semana Santa que concluyó con su domingo de resurrección.
Y no solo son los muy buenos comentarios de propios y extraños lo que lo dictaminan así, sino las estadísticas, manifestando estas que la Arenosa se convirtió en el destino preferido en Colombia durante la también conocida como Semana Mayor, recibiendo a 303.000 turistas.
De acuerdo a lo que informó la Alcaldía de Barranquilla, lugares emblemáticos como el Gran Malecón del Río fueron visitados por más de 110.000 personas, mientras que el Ecoparque Ciénega de Mallorquín también tuvo una vasta acogida de forasteros durante esta semana que, de cierto modo, representa unas cortas vacaciones para muchos colombianos.
En su balance, la Administración Distrital también destacó, ello también por haber sacado al Ejército a las calles de la ciudad, la disminución en muertes y lesionados por accidentes de tránsito, entre otros factores, que reflejaron un comportamiento positivo en esta temporada de reflexión y recogimiento, tal como la asumen otros ciudadanos.
Hubo algo vital para mantener el respeto y buen trato al turista y evitar lo que ha sido un “cáncer” en ciudades como Cartagena, con el fin de que se lleven una buena imagen de la Puerta de Oro de Colombia: el control de los precios.
Para lo anterior, la Oficina de Inspecciones y Comisaría de la Secretaría de Gobierno de la Alcaldía llevó a cabo operativos de control de precios, talla y calidad del pescado, así como del calibre de balanzas electrónicas y mecánicas. Estas actividades, con el apoyo de la Secretaría de Salud y la Policía Metropolitana, se realizaron para proteger a los consumidores, prevenir abusos o especulación de precios, acaparamiento y asegurar la calidad de los productos.