El técnico de La Equidad señala irregularidades y propone reformas para salvar el espectáculo del balompié nacional.
Por: Juliana Benavides.
Alexis García, un veterano técnico al mando de La Equidad, ha alzado la voz sobre el actual estado del fútbol colombiano. En una entrevista reciente, García fue contundente: “El torneo está despelotado”. El técnico señala que el campeonato atraviesa una crisis que va más allá de los resultados en la cancha. Las polémicas de arbitraje, decisiones del VAR cuestionables, violencia en los estadios, y la confusión en los calendarios y reglamentos han complicado la Liga, afectando a equipos como Atlético Nacional y Medellín en decisiones inesperadas y sanciones de último minuto.
“Es complicado planificar cuando no sabemos si vamos a jugar; hay semanas en que estamos 21 días sin competencia”, explicó García, destacando la incertidumbre que viven los entrenadores. A su juicio, esta situación lleva a los equipos a depender más de las individualidades que de un verdadero trabajo colectivo. “Los equipos con mayores inversiones en jugadores son los que salen adelante“, afirmó, refiriéndose al dominio de clubes como América y Nacional, cuyas figuras individuales hacen la diferencia en cada partido.
Además de los desafíos logísticos, el técnico cuestionó el ambiente en los estadios, donde la violencia y la presión han convertido el fútbol en una batalla personal para muchos aficionados. “El espectáculo se ha trasladado de la cancha a la tribuna; no competimos para ganar, sino para liquidar al rival“, declaró, criticando la actitud de los hinchas y el rol que juegan en la creciente inseguridad de los partidos.
García también propuso una reestructuración para el desarrollo de talento, sugiriendo crear una liga nacional sub-20 y una categoría C con ascenso. Según él, esta ampliación beneficiaría a regiones con gran potencial futbolístico, como Turbo, Buenaventura y Tumaco, dándole a jóvenes jugadores una oportunidad de destacar sin importar su edad.
“Para mejorar la Liga, necesitamos más compromiso de las autoridades, desde la dirigencia hasta los gobiernos locales y nacionales”, concluyó. García enfatizó que el fútbol puede ser una herramienta de formación social si se le da el respaldo adecuado. Para él, se trata de algo más grande que el juego mismo: es un esfuerzo por salvar a los jóvenes y devolverle al fútbol su esencia formativa.