Sebastián, quien residía en el inmueble, en Barranquilla, agradece a Dios que cuando colapsó la estructura él no estaba allí: “De todos modos, siento tristeza porque uno con esfuerzo y sacrificio consigue sus cosas”.
Alrededor de las 9:30 de la noche del pasado jueves 28 de noviembre una vivienda colapsó en la calle 87 con carrera 9G, en el barrio Evaristo Sourdis, en la localidad Suroccidente de Barranquilla, Atlántico.
Sebastián Enrique, quien residía en el inmueble, contó: “Yo estaba donde mi mamá y la casa se cayó, mis primas que viven al lado me dijeron que la casa se derrumbó totalmente; gracias a Dios en ese momento yo había salido, pero al llegar encontré todas las cosas destruidas, los televisores, los abanicos, las camas, todo quedó debajo de los escombros”.
Tanto el hombre como su pareja se salvaron de perder la vida en el lugar. “Ninguno de los dos estábamos en la casa. Perdimos televisores, lavadora, abanicos, las camas quedaron debajo de los escombros, ropa, escaparate, vitrinas y muchas cosas”.
Los bomberos del Distrito, la Policía Metropolitana de Barranquilla y representantes de la Oficina de Gestión del Riesgo hicieron presencia en el sitio. Sebastián agregó: “Hicieron el informe, me tomaron los datos. Los de Prevención y Desastres están haciendo una evaluación de todo lo ocurrido (…). Siento tristeza porque uno con esfuerzo y sacrificio consigue sus cosas y perderlo en un instante es duro, yo hago oficios varios, lo que salga, trabajo en un taller de costuras, mototaxi, lo que salga”.
Informe: Alexander Ojito – El Ojo de la Calle