La Policía Nacional no ha podido dar con la individualización de las dos “ratas” que acabaron con la vida de quien era padre de dos niños recién nacidos.
Se conoció en las últimas horas del fallecimiento del mototaxista Juber Eliuth Jiménez, de 35 años, quien recibió un disparo en la cabeza por parte de un atracador que, junto a un compinche, le hurtaron la motocicleta. Este hecho violento se registró la noche del viernes anterior en un tramo de la calle 28 con carrera 23 del barrio Los Trupillos, en el suroriente de Barranquilla.
Esta nueva víctima mortal de la inseguridad que flagela a la ciudad, de quien se supo dejó dos niños recién nacidos, había sido trasladada malherida al Hospital Barranquilla, donde emprendió desde esa misma noche una ardua batalla por seguir viviendo.
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No obstante, por la complejidad de la herida tras el fatal balazo que le atinaron, los galenos no pudieron hacer más para evitar que Juber perdiera la vida, por lo que de esta manera los “rateros” vuelven a dejar a una familia sin su ser querido, a una viuda y a unos niños huérfanos.
Recordemos que, cuando el mototaxista transitaba por dicha dirección en Los Trupillos, el parrillero de una motocicleta que lo venía siguiendo desenfundó su arma de fuego, una vez lo interceptaron, y le exigió que se bajara de la moto. Empero, al oponer resistencia el hoy occiso, el bandido sin piedad alguna le propinó el disparo en la cabeza y se terminó llevando la moto.
Hasta el momento, las autoridades policivas no tienen pistas ni del asesino ni de quien conducía el vehículo de dos ruedas en el que cometieron el asalto. Lo único que se recuperó fue la moto, la cual fue rastreada horas después del crimen en otro sector de la ciudad gracias al GPS.
Informe: Alexander Ojito – El Ojo de la Calle
Redacción: Iván Peña Ropaín
