“Es un gesto que abre caminos y reafirma la inclusión como uno de los pilares fundamentales del servicio policial”.
Barranquilla fue escenario de un acto que va más allá del deber institucional y toca directamente el corazón de la comunidad. La Policía Fiscal y Aduanera (Polfa) demostró que su misión no solo se limita a proteger el orden económico y la seguridad fiscal del Estado, sino que también se construye desde la sensibilidad humana, la solidaridad y el compromiso social.
En un emotivo gesto, la institución hizo entrega de un medio de transporte a un ciudadano en condición de discapacidad física o con movilidad reducida, una acción que representa mucho más que un apoyo material. Este acto simboliza libertad, autonomía y dignidad; es la posibilidad de avanzar sin barreras, de retomar la independencia y de enfrentar el día a día con mayor confianza y esperanza.

La entrega de este medio de transporte se convierte en una herramienta de transformación, que abre caminos y reafirma la inclusión como un pilar esencial del servicio policial. Para quien lo recibe, significa recuperar movilidad y oportunidades; para la comunidad, es una muestra clara de que la Policía está presente no solo en el control y la legalidad, sino también en los momentos en que más se necesita apoyo humano.
El coronel Miguel Andrés Camelo Sánchez, comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, destacó la importancia de este tipo de acciones y el impacto que generan en la vida de las personas.
“Creemos firmemente que las pequeñas acciones generan grandes transformaciones. Este medio de transporte representa esperanza, autonomía y progreso, y refleja nuestro compromiso permanente con el bienestar de la comunidad y la construcción de un futuro con mayor igualdad y oportunidades para todos”, afirmó el oficial.

Con este gesto solidario, la Policía Metropolitana de Barranquilla ratifica que servir y proteger también es acompañar, apoyar y transformar vidas. La institución indicó que continuará impulsando iniciativas de alto impacto social que fortalezcan la confianza ciudadana y promuevan valores como el respeto, la inclusión y la solidaridad, demostrando que una Policía cercana y humana es capaz de sembrar esperanza y cambiar realidades.




