En lo corrido de noviembre se han presentado más de cuatro hechos sicariales en la población.
En horas de la mañana de este jueves 20 de noviembre se reportó la muerte de Sneyder Ramos, el joven de 26 años que había sido víctima de un atentado sicarial el pasado 11 de noviembre, en el barrio San José etapa 2, en Baranoa.
La acción sicarial de la que fue víctima en ese momento se registró cuando estaba sobre vía pública y un hombre armado lo interceptó, propinándole un disparo en el abdomen y otro en la espalda.
Herido de gravedad fue llevado a la Clínica Reina Catalina de Baranoa, en donde permaneció más de ocho días internado en la unidad de cuidados intensivos bajo pronóstico reservado y luchando por sobrevivir.
El caso se sumó a la reciente racha de acciones criminales y violentas ocurridas en esa población del centro del Atlántico recientemente, engrosando una cifra de 30 homicidios durante lo que va del año 2025.
La situación de violencia y criminalidad en Baranoa parece que se salió de control y obedecería a disputas entre bandas delincuenciales por el control territorial relacionado con el tráfico de estupefacientes.
Es válido mencionar que el alcalde de ese municipio solicitó la intervención del Gobierno y el despliegue del Ejército en el casco urbano y rural para brindar mayor seguridad a la población civil.




