Se trata de la sentencia más dura dictada contra un exmandatario brasileño desde el retorno a la democracia en 1985.
El Tribunal Supremo Federal (STF) de Brasil condenó este jueves al expresidente Jair Bolsonaro a 27 años y tres meses de prisión en régimen cerrado, tras declararlo culpable por su implicación directa en un intento de golpe de Estado en enero de 2023.
Por amplia mayoría, los magistrados del Tribunal Supremo consideraron probada la responsabilidad de Bolsonaro en la articulación y promoción de los actos antidemocráticos que culminaron en el asalto a las sedes de los Tres Poderes en Brasilia, el 8 de enero de 2023, una semana después de dejar el cargo.
La sentencia señala que el exmandatario “instigó, financió y no impidió un intento deliberado de subvertir el orden constitucional”, en referencia a los discursos, reuniones y mensajes difundidos por Bolsonaro y su círculo cercano que ponían en duda los resultados de las elecciones de 2022, en las que fue derrotado por Luiz Inácio Lula da Silva.
“No se trata solo de un ataque físico a los edificios del Estado, sino de un atentado contra los pilares de la democracia brasileña”, afirmó el juez relator Alexandre de Moraes durante la lectura de la sentencia.
La condena incluye los delitos de asociación criminal, incitación al crimen, intento de abolición violenta del Estado de Derecho y atentado contra la democracia, todos agravados por su condición de jefe de Estado al momento de los hechos.
Jair Bolsonaro, expresidente de Brasil ahora condenado por un presunto golpe de Estado.
El fallo contra Bolsonaro es el primero dentro del juicio a los principales responsables del intento de golpe de Estado. El STF aún debate las penas para otros exfuncionarios, militares y empresarios señalados como parte de la trama golpista. Entre ellos figuran el exministro de Defensa, general Braga Netto, y varios miembros del alto mando militar retirado.
La defensa de Bolsonaro anunció que apelará la decisión y denunció un “proceso político disfrazado de juicio judicial”. Sin embargo, tanto organismos internacionales como la mayoría de los partidos del Congreso brasileño han respaldado el fallo como una muestra de la solidez institucional del país.
Desde la Casa Blanca en Estados Unidos, gobierno que se ha mostrado como defensor del expresidente brasileño, manifestaron que la decisión de enviar a la cárcel a Bolsonaro es “injusta” y añadieron que responderán con consecuencias. Cabe subrayar que el Gobierno Trump ha impuesto sanciones como la cancelación de visas a los magistrados que han actuado en este proceso, entre ellos Alexandre de Moraes, quien ha mostrado firmeza para dictar sentencia sin importar las intimidaciones.
“Continúan las persecuciones políticas contra Alexandre de Moraes, sancionado por violar los derechos humanos, luego de que él y otros miembros de la Corte Suprema de Brasil decidieron injustamente encarcelar al expresidente Jair Bolsonaro. Estados Unidos responderá en consecuencia a esta caza de brujas”, declaró el secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio.
Informe: Luis Ángel Terán
The political persecutions by sanctioned human rights abuser Alexandre de Moraes continue, as he and others on Brazil's supreme court have unjustly ruled to imprison former President Jair Bolsonaro.
The United States will respond accordingly to this witch hunt.