El central “charrúa” aterrizó en Quilla lesionado, lo que no le permitió estar en las tres primeras fechas. En ocho partidos del Rojiblanco en este segundo semestre, solo ha jugado 54 minutos.
Por: Iván Peña Ropaín.
El backcentral uruguayo Lucas Monzón llegó para reforzar en esta segunda fase de la temporada 2025 al Junior de Barranquilla que, sin decirnos mentiras, le sigue constando el consolidar una zona defensiva férrea.
No obstante, cuando aterrizó a suelo ‘currambero’, el central de 23 años no llegó en buenas condiciones físicas, lo que no se hizo raro entre muchos hinchas, ya que a través de los tiempos la gerencia del Junior se ha caracterizado por traer jugadores con afecciones físicas, como el recordado caso del peruano “Mudo” Rodríguez.
Quien llega procedente del Racing Club de Montevideo, no pudo debutar de una con el Rojiblanco, como lo dicta la lógica, ya que es una contratación. Solo se le notó para la fecha 4 de Liga-II, y eso, jugando 9 minutos, cuando entró sobre el final del cotejo frente al Once Caldas.
No actuó contra Deportivo Cali, por la primera jornada; Águilas Doradas, por la segunda, y Unión Magdalena, por la tercera, debido a que venía recuperándose de una lesión en el tendón del aductor, lo que no era tampoco algo tan grave.
Volvió a tener actuación por la ida de los playoffs de Copa Colombia frente al Atlético Huila. Monzón salió como titular y jugó 45 minutos, ya que luego terminó siendo sustituido, sin mostrar mayor cosa durante el tiempo que estuvo en cancha.
Desde ese duelo del cuadro ‘currambero’, al “charrúa” no se le observó más, solo en el banco de suplentes por la jornada 5 de la Liga-II contra Boyacá Chicó y no siendo convocado ni para la vuelta por Copa contra el opita ni en el reciente por la fecha 6 frente al Envigado.
Sobre su ausencia en esos dos últimos cotejos, se había informado que Monzón devengó una sobrecarga muscular, que aunque no tiene que ver con algo complejo, sí lo coaccionó para que guardara algo de reposo.
