Los árbitros en el fútbol colombiano siguen fallando en sus interpretaciones, nada que “le sacan el jugo” a esta valiosa herramienta tecnológica.
Por: Iván Peña Ropaín.
Uno de los temas en los que deberá trabajar arduamente quien sea escogido como nuevo presidente de la División Mayor del Fútbol Profesional Colombiano (Dimayor), comicios prorrogados para el próximo martes 25 de marzo y que se efectuarán en Barranquilla, será el pésimo manejo que los árbitros vienen dándole al VAR.
Son muchas las erratas en las que se sigue incurriendo al momento de tomarse una decisión sobre una jugada dudosa por intermedio del Asistente de Video Arbitraje, terminando muchas de ellas en perjudiciales para el equipo que es objeto del análisis de la infracción.
Sabido eso, quien asuma el liderato de la Dimayor deberá laborar con firmeza en mejorar las evaluaciones que hagan los referís y los asistentes de VAR para minimizar, o erradicar del todo, ojalá esto último, las malas interpretaciones.
Muchos han sido los clubes que se han visto afectados por el error humano, más no por el tecnológico, convirtiéndose en una constante que en las ruedas de prensa post-juego tanto técnicos como jugadores salgan a quejarse en público.
Ante ello, en medio de la asamblea ordinaria que se adelantó el martes anterior en Bogotá y en la que se escogería al nuevo presidente de enunciado ente futbolero, se conoció de manera extraoficial que el presidente del club Águilas Doradas, Fernando Salazar, propuso a los otros 35 directivos de los equipos profesionales del balompié colombiano que se hallaban en la reunión y que son afiliados de Dimayor, que se elimine el VAR, pues más que ayuda ha sido algo muy perjudicial, dictamen en el que tiene toda la razón.




