Los investigadores judiciales que están al frente del levantamiento de los cadáveres de María Isabel Llach Barros, de 54 años de edad, asesora de la Procuraduría Provincial de Barranquilla, y de su madre, Josefina María Barros, de 78 años, hallaron en la habitación principal de la casa del barrio Betania, elementos que llaman mucho la atención.
Positivas por COVID-19
La investigación allegada del equipo de rastreadores del Instituto de Medicina Legal, indica que María Isabel Llach Barros, abogada de profesión y su señora madre Josefina María Barros de Llach, acudieron a un laboratorio en el norte de Barranquilla para realizarse la prueba de Covid-19, y las dos resultaron positivas.
“Sólo podemos confirmar que las dos mujeres fueron diagnosticadas positivas frente a una prueba de RT-PCR en tiempo real. Las pruebas se las hicieron el 13 de noviembre y recibieron los resultados el día 15, pero todo está sujeto a verificación; las pruebas científicas dirán si ambas murieron a causa del virus Covid-19”, adelantó un investigador de Medicina legal a Impacto News.
Hallazgo de veneno raticida
Luego del análisis detallado en todas las habitaciones de la vivienda ubicada en la carrera 38A número 74-32, del barrio Betania, en Barranquilla, en el que se utilizaron equipos de alta tecnología para detectar derramamiento químico, rastros de fluidos corporales y señales de violencia, los investigadores encontraron en una caneca para desperdicios de la cocina un sobre de papel vacío de una reconocida marca industrial de veneno raticida.
Este significativo detalle lleva a los investigadores a contemplar una nueva hipótesis sobre la causa de las dolorosas muertes: el suicidio acordado de las dos damas.
“El contenido estomacal en los dos cuerpos lo dirá todo. Los procedimientos del análisis patológico a los dos cuerpos se realizarán hoy mismo (17/11/2020) y los contenidos estomacales deben ser analizados por especialistas en intoxicación. No se descarta incluso el homicidio, todos estos detalles que hallamos en la casa nos indican situaciones normales dentro de una casa normal, sólo que por tratarse de la muerte de dos personas debemos ser muy puntuales en los análisis- concluyó el investigador.
Sebastián, el joven que se hallaba en la casa al momento de producirse la muerte de su madre María Isabel y de su abuela Josefina María Barros de Llach, fue enviado a análisis médico para establecer su estado de salud.
Dentro de la tesis de un posible suicidio, un vecino y amigo cercano se resiste a creer en esta posibilidad. “El amor de María Isabel hacia su hijo Sebastián, de condiciones especiales, era inmenso. Sería incapaz de dejarlo a la deriva y sin protección”, añadió.
“Si las dos damas acordaron acabar con su vidas ¿por qué no hicieron nada contra Sebastián? Algo no encaja ahí”, comentó un abogado, vecino de las damas en el barrio Betania.
Los cuerpos fueron hallados en diferentes lugares
Los investigadores de Medicina Legal comentaron además que María Isabel Barros y su madre Josefina María Barros de Llach, fueron halladas sin vida en sitios diferentes de la casa.
“La abogada estaba recostada en la cama principal de su habitación y su anciana madre fue hallada sentada sobre un sofá ubicado en un espacio entre la cocina y la sala de la casa. Curiosamente, las dos damas estaban vestidas con ropa parecida. No tenían señales de violencia por asfixia mecánica, golpes, moretones, magulladuras ni heridas producidas por armas. Todas las pertenencias de las dos damas estaban en perfecto orden, así que descartamos que alguien extraño haya podido ingresar a la casa”, detalló en su informe el detective.
Asesora de la Procuraduría
María Isabel Llach Barros estudió Derecho en la Universidad Libre de Barranquilla y trabajó activamente en la redacción de la Constituyente de 1991, actuando como asesora del exgobernador del Atlántico, Eduardo Verano De la Rosa. Se hizo abogada con especialización en Derecho Disciplinario y Gestión Pública.
Desde joven, María Isabel se interesó por la actividad política, se mudó a la ciudad de Bogotá en donde hizo activismo en las llamadas Juventudes Liberales. De regreso a Barranquilla se vinculó como asesora investigadora de la Procuraduría Provincial.
Los detectives solicitaron un dossier de los casos que asumió en los últimos años la abogada María Isabel Llach Barros, en el proceso de indagación.
Los resultados de los análisis de Medicina Legal serán entregados a la Fiscalía la próxima semana.