La mujer de 20 años de edad, quien se encontraba reciclando, dejó cuatro hijos.
La vida de Marcelina Inocencia Mercado Coronado, 20 años, se apagó injustamente a las 2:00 a. m. del 31 de julio, dejando a cuatro niños sin su madre y a una familia totalmente destrozada, viviendo en una pesadilla que nunca creyó experimentar.
Los hechos que la llevaron a la muerte se registraron el pasado 23 de julio en el barrio San Roque, al suroriente de Barranquilla, Atlántico, cuando la mujer se interpuso entre su pequeña hija y una “bala perdida”; aunque luchó durante varios días y los galenos hicieron su esfuerzo por salvarla, esto no fue posible.
“Venían persiguiendo a un muchacho en la 35 con 32, mis dos sobrinas estaban reciclando, estaban disparando y ella iba a coger a la niña y recibió la bala en el abdomen, la llevaron al Hospital de Barranquilla, donde duró hasta ayer; hasta el momento no han capturado al homicida”, contó Silvia Mercado Ospino, tía de Marcelina.
La joven deja una niña de seis años, una de cinco, una de cuatro y un menor de año y medio. Desde las instalaciones de Medicina Legal en Barranquilla, Amalfi Martínez, madrina de la hoy difunta, pidió por el bienestar de los menores:
“Ahora queda luchar por ellos, que los familiares les den amor y estudios; ella era una niña muy alegre, no era peleonera, pero así es el destino, ella salvó a su hija, por quererla la salvó, yo le pido a los abuelos que den amor a esos niños y que no los desamparen, al papá se lo pido más que todo”.
Informe: Alexander Ojito – El Ojo de la Calle