Semanas atrás desapareció otro que encarnaba al Caribe en el fútbol colombiano: Valledupar FC, ciudad que ahora no tiene equipo.
Por: Iván Peña Ropaín.
Pendiendo de un hilo, o más bien de una decisión, está la suerte del Real Cartagena, uno de los tres tradicionales equipos que viene representando desde febrero de 1992, fecha de su afiliación ante la División Mayor del Fútbol Profesional Colombiano (Dimayor), a la Región Caribe en el fútbol profesional colombiano. Resulta que los actuales dueños del cuadro cartagenero, la empresa Colombiagol (empresa de Helmuth Wenning), habrían amenazado con liquidar al equipo y vender su ficha.
En una rueda de prensa extraordinaria cumplida en el Centro Histórico, Edinson Garcés, Francy Meza, Marcela Rendón, Juan Pablo Rendón y Dalila Rendón, antiguos dueños y socios y vendedores del 74,09% de las acciones de ese club costeño, denunciaron presuntos incumplimientos en lo pactado en el contrato sobre la venta del equipo por parte de Colombiagol.
Dichos vendedores de las acciones, a través de su abogada Saddy Pérez, aseguraron que dicha empresa, representada por el empresario barranquillero Helmuth Wennin, les adeuda todavía 12.700 millones de pesos, que con intereses, ese monto asciende a 18.400 millones.
De acuerdo a lo que siguieron declarando ante los medios presentes, la venta de las acciones se dio en el año 2020 por un total de 15.200 millones de pesos. No obstante, dicen los exsocios, que toda la negativa a pagar se ha dado muy a pesar de que Colombiagol ha tenido buenas ganancias durante 30 meses, las cuales ascenderían a los 20 mil millones de pesos producto de derechos de televisión, venta de jugadores y otras prebendas. Empero, el monto de la deuda no ha sido pagado todavía.
“El acuerdo simple es que las personas a quienes represento le vendieron el 74,09% de las acciones a Colombiagol por una suma de 15.200 millones de pesos, de ese valor el señor Helmuth pagó 2.500 millones y para el resto del saldo se le concedió un plazo de dos años que se vencieron en el mes de noviembre de 2022, y sobre el cual se ha negado a pagar inventando miles de excusas”, aseguró la legista Saddy Pérez.
Ante la especie de ‘zig-zag’ que dicen le vienen haciendo, la sociedad vendedora de las acciones del Auriverde está dispuesta a ir a los entes rectores del fútbol colombiano como Federación Colombiana de Fútbol y Dimayor.
Y la situación que pondría en riesgo la existencia de este tradicional club del Caribe colombiano radica en lo que les habría manifestado el señor Helmuth, que fue, según la abogada Pérez: “Cuando nosotros le planteamos inicialmente que esperábamos el pago, el señor Helmuth manifestó de forma muy olímpica que si no queríamos acceder a sus pretensiones, simplemente él dejaba que se liquidara el Real Cartagena y pedía que se le asignara una ficha para un nuevo equipo, con el propósito de quedarse con la plaza. Esa es una actitud de chantaje”.
