Esta noche se sabrá si el Tiburón reporta su segundo fracaso del semestre, siendo el primero la prematura eliminación de la Sudamericana.
Por: Iván Peña Ropaín.
Hablar de módulo táctico, de la nómina con la que debería saltar la noche (7:00) del miércoles 17 de mayo al gramado del Guillermo Plazas Alcid o con qué actitud debe salir Junior de Barranquilla para encarar la última fecha 20 de la Liga Betplay-I ante Atlético Huila, es lo que menos importa en estos momentos.
Y todo lo anterior lo deben omitir hasta aquellos periodistas quienes en sus análisis se creen Carlo Ancelotti, Carlos Bianchi o Pep Guardiola, ya que el panorama está muy turbado en este cierre del “todos contra todos”, contrastando tal percepción negativa con las muchas voces de hinchas junioristas que no dan ni un peso porque el Tiburón logre meterse al grupo de los ocho e inscribir así su nombre en los cuadrangulares finales del torneo del primer semestre del 2023. Aunque igualmente hay que anotar que, en menor proporción, están esos seguidores que se aferran a esa ‘lucecita’ de esperanza que le ilumina a Junior el camino para hacer lo que parece utópico.
El equipo de los barranquilleros y aquellos costeños que son junioristas se acogerá al típico rezo al que ha apelado en estas últimas jornadas del Torneo Apertura y que no ha sido ajeno a campeonatos pasados, con el fin de la consumación de un ‘milagrazo’ que se le debe dar con tres resultados.

Con la mayoría de los que convocó para el partido de la fecha pasada en Barranquilla frente al Deportivo Pereira, manteniéndose firme Hernán Darío ‘Bolillo’ Gómez al no citar a los cuatro jugadores (Omar Albornoz, Cesar Haydar, José Ortiz y Walmer Pacheco) investigados por actos de indisciplina, el Rojiblanco chocará con los opitas, duelo que no solo deberá ganar, sino que tendrá que estar pendiente al tiempo de lo que ocurra en tres de cuatro cotejos.
El ‘milagrazo’ que necesita Junior
Santa Fe de Bogotá es séptimo con 26 puntos, Independiente Medellín es octavo con 26, Deportivo Pasto es noveno con 26 y La Equidad de Bogotá es décimo con 25, mientras que Junior de Barranquilla funge como undécimo también con 25.
Así las cosas, dicho ‘milagrazo’ deberá obrar para la institución barranquillera de la siguiente manera: que del rojo de los cachacos hasta el conjunto verde de Bogotá pierdan o empaten tres de esos cuatro clubes, y que Junior saque una victoria en Neiva, así sea por un gol a cero.
En el caso de Santa Fe de Bogotá, este visitará al Once Caldas, club que si bien está eliminado desde fechas atrás, necesita ganar para iniciar alejado en el segundo semestre de las dos posiciones de descenso directo.
Luego viene el rojo de los antioqueños, que tiene un horizonte menos intrincado por meterse a los ocho. Enfrentará en casa al último en el descenso y también despachado del Torneo Apertura, Unión Magdalena.
En la situación del Pasto, igualmente la tendría sin enredos debido a que en su estadio La Libertad recibirá a otro eliminado y que no le pondría mucho óbice, Envigado FC.
Y en el otro de esos que se necesita de la ayuda divina, La Equidad visitará en El Campín a Millonarios, club que marcha líder de la Liga-I y ya está clasificado a los cuadrangulares, pero el que se cree saldrá a ganar por el denominado punto de bonificación, ese que concede el acabar primero en la tabla y el que permite cerrar como local en dado caso de llegar a la gran final. Puede perder la posición en dicha última fecha si empata o pierde con los Aseguradores y Águilas Doradas de Rionegro derrota en su cotejo a Jaguares de Córdoba.




