Tomás Maldonado Cera, de 52 años de edad, acabó con la vida de la mujer en una zona enmontada de Miramar, en Barranquilla.
Por: Laura Rocco
46 años en la cárcel deberá pagar Tomás Manuel Maldonado Cera, alias el Satánico, tras ser hallado responsable del feminicidio agravado de Brenda Pájaro Bruno, ama de casa cuyo cuerpo sin vida fue encontrado en zona enmontada del barrio Miramar en Barranquilla, Atlántico, en agosto de 2018.
Así lo determinó la jueza Carmen Ospino en la tarde de este jueves 17 de agosto: “El despacho tiene en cuenta el delito de feminicidio agravado y las circunstancias de agravación punitiva por haber puesto a la víctima en estado de indefensión. Ante la convergencia de circunstancias, el despacho decide 552 meses de prisión, rango establecido dentro de los cuartos medios en contra del señor Tomás Maldonado como responsable del delito de feminicidio agravado“.
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Para la jueza, el elemento incautado más importante que llevó a esta condena fue un vehículo Cherry Van Pass modelo 2014, dicha incautación fue hecha por el equipo de Policía Judicial. En el mismo se observó a Pájaro, en el asiento de copiloto, portando una camiseta de la Selección Colombia, poco antes de ser asesinada, dicha camioneta era conducida por Maldonado.
También, fue clave la ubicación del teléfono celular de Maldonado, detectada cerca del lugar de los hechos, desde donde el feminicida hizo una llamada a su compañera permanente, un minuto después de que fuese visto por la cámara de seguridad 15 del conjunto residencial Parque 100.
“La muerte de la señora Brenda Inés se produjo de manera violenta; dado el estado de descomposición del cuerpo encontrado se construye de manera inequívoca que la fecha de deceso coincide con la fecha de desaparición, el 25 de julio, día que iba a bordo de un vehículo conducido por Tomás Manuel Maldonado Cera; también se considera la última ubicación del celular de la procesada que coincide con la ubicación de Maldonado, ya que este realizó una llamada desde las inmediaciones de donde fue encontrado el cuerpo de la víctima, el vehículo Van Pass corresponde al mismo que para la fecha de los hechos era de propiedad de Francia Gamarra Masa, esposa del procesado”, señaló la jueza Ospino.
Para Ospino también se comprobó que quienes descendieron del vehículo, captado por las cámaras de seguridad el 25 de julio, fueron Tomás Manuel Maldonado y Brenda Inés, y quien entró al vehículo después de haber ingresado a la zona en montada con la señora Brenda fue Tomás Manuel Maldonado Cera.
La jueza dejó claro que se pudo probar la presencia del hombre en el lugar de los hechos y “al ser este la última persona que estuvo con la víctima el día de la desaparición, se puede deducir de manera lógica que el señor Tomás Manuel Maldonado es el responsable de la muerte“.
Sobre las características del hecho que lo convierten en un feminicidio, indicó: “Se concluye que lo que surgió por parte del procesado fue el aprovechamiento del estado de indefensión de la víctima, posiblemente, engaños fueron utilizados para que la señora Brenda accediera a entrar al lugar enmontado con el procesado. Resulta entonces reprochable la cosificación de la mujer, el desprecio que mostró hacia ella al dejarla tirada a la intemperie, los golpes contundentes que claramente originaron la muerte terminan siendo muestra de la instrumentalización”.
Respecto al delito de hurto, la togada advirtió que no se pudo comprobar que Maldonado Cera hubiese robado un celular y un anillo de oro de Pájaro, tampoco se pudo determinar que el hombre hubiese abusado sexualmente de la víctima, si ella voluntariamente aceptó tener relaciones con él o si hubo o no una relación, por lo que el individuo fue absuelto de esas dos conductas: “La Fiscalía cometió errores en la investigación pretendiendo demostrar los mismos a través de sus testigos”.
La defensa de Maldonado indicó que presentará recurso de apelación. Cabe resaltar, que el abogado defensor, incluso, después de que el hombre fuese condenado, y antes de que se leyera el monto de la pena que deberá pagar, aseguró confiar en la inocencia de su defendido.
