La condena se logró tres años y nueve meses después de los hechos.
Tras un largo proceso, la justicia colombiana condenó a 15 años y siete meses de prisión a Armando José Castro Maldonado, hombre que le cortó el cuero cabelludo a su expareja Kenede Susana Vega Garizao el lunes 20 de agosto de 2018.
A sus 25 años la joven fue brutalmente agredida con un chuchillo por parte del sujeto, padre de sus tres hijos, en una vivienda del barrio Las Gaviotas, en Soledad.
El día de los hechos, Kenede llegó a la casa de su cuñada para buscar a los niños, allí se encontró con Armando, con quien había terminado dos meses atrás. Ese día el individuo la convenció de quedarse para dormir con los pequeños sobre una colchoneta en la sala de la vivienda.
Castro intentó tener relaciones sexuales con ella, pero la mujer no aceptó, de repente, él se levantó de la colchoneta y Vega creyó que la iba a dejar en paz, sin embargo, lo peor estaba por llegar.
El agresor fue a buscar un cuchillo y, al regresar, la tomó con fuerza y la colocó boca abajo, luego procedió a arrancarle el cuero cabelludo frente a los menores de edad.
Cabe detallar, que el 17 de julio del mismo año Kenede Vega ya había denunciado al individuo por violencia intrafamiliar.
Mientras estaba hospitalizada, la víctima reveló que el sujeto ya había intentado ahogarla en un tanque con agua y que en varias ocasiones se había llevado a sus hijos sin su consentimiento, así como lo hizo luego de dejarla gravemente herida en ese mes de agosto.
Castro Maldonado, quien era barrista de Los Kuervos, banda que en ese entonces repudió el acto de violencia, fue capturado días después mediante orden judicial, imputado y enviado a la cárcel El Bosque bajo medida de aseguramiento.
El 5 de abril del año en curso el Juzgado Primero Penal del Circuito de Soledad emitió un fallo condenatorio en su contra, aunque solo hasta este jueves 26 de mayo se conoció el tiempo que deberá pagar.
La defensa del agresor intentó que a este le dieran el beneficio de casa por cárcel, pero dicha solicitud no fue aceptada; al conocer la condena, interpuso un recurso de apelación.
